Apiturismo La Siberia.


Empezar un proyecto siempre es difícil, y el primer problema que se plantea es de estructura. Las ideas se acumulan, vienen de todos los lados,  pero después hay que darle forma.  El objetivo lo teníamos claro desde el principio, incluso allá por el 2010 cuando empezamos con la idea turística a través de la Casa Rural.

 La Comarca de la Siberia es un territorio con un enorme potencial humano, ecológico y turístico, que no termina de llegar a la gente. Hay muchos lugares en España con características similares que gozan de una visibilidad, que esta Comarca no acaba de tener. Aquí mismo en Extremadura sin ir más lejos: El maravilloso Valle del Jerte, los Ibores, el universo romano en Mérida etc..  Cada uno con lo que tiene. Y lo que tiene la Comarca de La Siberia, es mucho, como para seguir estado a oscuras. Se da la paradoja que es todo lo contrario a oscuridad. Lo tiene todo:  Agua, luz, naturaleza virgen, temperatura perfecta.

 Hay gente que sabe que este es “el sitio”. Como los directivos de Cora Alpha, que han puesto su mirada en ella para su macroproyecto de Elysium City en el término de Castilblanco. Y anteriormente a ellos, otros también supieron que era el sitio, aunque no se llegaran a ejecutar sus proyectos.

 Por tanto, que podemos seguir haciendo nosotros por esta Comarca? Pues seguir vinculando los aspectos de nuestra vida. Somos apicultores, una actividad que desarrollamos en plena naturaleza, y proponerla como un atractivo turístico más, puede resultar un incentivo para el viajero que busca un tipo de turismo íntimo, pausado e instructivo.

 Acabamos de lanzar al mercado nuestra propia marca de miel y a todos los sitios que hemos ido de promoción, inevitablemente, hemos llevado consigo a La Siberia. Entonces...por qué no unir turismo y apicultura?. Y de ahí sale la idea. Ofrecer conjuntamente, el destino turístico, con la posibilidad de realizar actividades singulares  que en otros sitios, maravillosos también,  no es posible realizar.


 Os invitamos a dar un paseo virtual a través de nuestra página web y, por supuesto, os animamos a que os acerquéis para vivirlo en persona. Nuestro proyecto es real, austero y sincero. No soñamos con construir una megápolis del ocio, ni transformar un par  de cercones en aeropuerto para atraer al turismo en masas.

 El enclave y sus posibilidades, ya son lo suficientemente poderosos, en su estado natural, para captar la atención del viajero aventurero, minimalista y comprometido con el Medio Ambiente. Y nosotros, que hemos nacido, vivimos y trabajamos dentro de él, soñamos con la idea de compartirlo desde nuestra perspectiva. Ofreciendo lo que somos y lo que tenemos.

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